La inflamación es la respuesta que tiene nuestro cuerpo ante infecciones y lesiones. Sin embargo, cuando esta respuesta se vuelve crónica, puede contribuir al desarrollo de diversas enfermedades, como la artritis, la diabetes y las enfermedades cardíacas. Incorporar alimentos antiinflamatorios en nuestra dieta diaria puede ayudar a contrarrestar esta respuesta y promover un equilibrio saludable.
Frutas y verduras
Las frutas y verduras son una fuente rica en antioxidantes, compuestos que combaten los radicales libres responsables de la inflamación. Te recomendamos incluir en tu compra los siguientes:
- Arándanos: tienen altos niveles de antioxidantes y son conocidos por sus propiedades antiinflamatorias. Puedes añadirlos a batidos, yogures o consumirlos solos como un snack saludable.
- Espinacas: las espinacas son ricas en flavonoides y son una excelente opción para combatir la inflamación. Se puede incluir en ensaladas, salteados o incluso en batidos verdes.
- Cerezas: las cerezas contienen antocianinas, compuestos que han demostrado reducir la inflamación. Ya sea frescas o como zumo, las cerezas son una opción deliciosa y beneficiosa.
Ácidos grasos omega-3: pescado y frutos secos
Los ácidos grasos omega-3 son conocidos por sus propiedades antiinflamatorias, de las cuales hemos hablado en numerosas ocasiones. Algunas fuentes de estos ácidos grasos son:
- Salmón: rico en ácidos grasos omega-3, el salmón es un pescado que no solo es delicioso sino también beneficioso para reducir la inflamación. Prepáralo como te guste, ya sea al vapor, a la plancha o al horno.
- Nueces: son una fuente vegetal de omega-3. Agregarlas a ensaladas, yogures o simplemente disfrutarlas como un snack puede ser una forma fácil de incorporar este nutriente a tu dieta.
- Chía y semillas de lino: ambas son opciones ricas en omega-3. Pueden añadirse a batidos, yogures o utilizarse como aderezo en ensaladas.
si no consumes suficiente pescado, los suplementos de omega-3 son una opción conveniente que encontrarás en la farmacia.
Hierbas y especias antiinflamatorias
Además de las frutas, verduras y fuentes de omega-3, ciertas hierbas y especias también pueden contribuir a combatir la inflamación. Entre las más destacadas se encuentran:
- Cúrcuma: este potente antiinflamatorio natural se ha utilizado durante siglos en la medicina tradicional. Puedes añadirla a guisos, sopas o incluso a un reconfortante té. También está disponible en forma de suplemento en muchas farmacias.
- Jengibre: al igual que la cúrcuma, el jengibre también nos aporta propiedades antiinflamatorias. Puede ser utilizado en la cocina o añadido a infusiones para aprovechar sus beneficios.
- Ajo: además de añadir sabor a tus platos, el ajo contiene compuestos antiinflamatorios que pueden ayudar a mantener un equilibrio saludable en el cuerpo.
Además de los alimentos que hemos mencionado, te recomendamos consumir grasas saludables, como las presentes en aguacates, nueces y aceite de oliva extra virgen y evitar las grasas saturadas y trans, para reducir y prevenir la inflamación.
Por último, los probióticos, tanto en forma de alimentos fermentados como de suplementos de farmacia, ayudan a mantener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino, lo que ayuda a reducir la inflamación.